martes, 18 de junio de 2019

Granja El Jarama 2019


NOCHE EN LA GRANJA


Tras semanas de larga espera, llegó el día, y no uno cualquiera.... nos íbamos a la granja. Carreras de un lado a otro y algo de nervios (no solo de los niños) hacían preveer que el momento estaba a punto de llegar. Eran poco antes de las cuatro cuando el autocar apareció allá, a lo lejos. Fue una explosión de emociones, ya si que sí, llegó el momento. Comenzamos a subir al autocar y poco a poco nos íbamos colocando en los asientos, esos si, junto a nuestros amigos. Tras una larga espera, partimos hacia el paraiso.....















Un siglo después ( equivalencia a 45 min. en la medida del tiempo de un niño de 1º de primaria), llegamos a la granja. Allí nos esperaban, Isabel, Almudena, Laura, Alex y Carlos, que serían los encargados de hacérnoslo pasar genial.
Después de la bienvenida y colocar las mochilas en las habitaciones, disfrutamos de un riquísimo tentempié.




 Ya con el estomago lleno, era momento de la aventura. Nos separamos en cuatro grupos... Monitos, Perrunos, Ciempiés y Super granjeros, eran nuestros nombres de guerra.

Ciempiés y Super granjeros, dimos un paseo por las temibles aguas del lago de la granja, en las que lo peligroso no eran las profundidades del  lago (45 cm de profundidad, ni mas ni menos) sino las otras embarcaciones piratas que surcaban nuestras aguas.
Al terminar nos fuimos a a granja, donde vimos un montón de animales,  de los que aprendimos mucho.






Monitos y Perrunos, como si fuéramos los mismísimos protagonistas de la película FREE SOLO, nos enfrentamos a una pared vertical de 6 m, dispuestos a tocar el cielo.




























Sin darnos cuenta ya era hora de cenar. Nos dirigimos al comedor,  haciendo una parada en los baños para lavarnos las manos. Al entrar, un rico manjar nos esperaba en la mesa. El banquete comenzó, y todos pudimos disfrutar de una rica sopa de fideos, acompañada de nuggets y croquetas. Estaba tan bueno, que muchos de nosotros repetimos.
Tras recoger nuestras mesas y dejarlo todo super limpio, dedicamos un tiempo a eso que tanto nos gusta hacer, jugarrrrrrrrrrrrrr. Unos, le jugamos al fútbol, otros al baloncesto, otros simplemente charlábamos.















El día llegaba a su fin, pero no la diversión, ya que nos quedaba la velada. Esta vez, Isabel, Almudena, Laura y Alex nos propusieron un juego super chulo, llamado naranjas y limones.
A medida que el juego avanzaba, nuestras fuerzas flaqueaban, así que tras terminar el juego, nos fuimos a las habitaciones a disfrutar de un merecido descanso, no sin antes pasar por el baño a lavarnos los dientes.







Ya habiendo terminado de hacer nuestras cosas, quedaba meternos en la cama y dormir........ pues noooooooooooooooooo, algunos teníamos fuerzas suficientes para intercambiar opiniones con nuestros amiguitos, pero claro, al final todos caímos rendidos.







KIKIRIKIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII, dulce melodía la que nos levanto por la mañana, es cierto que algunos necesitamos algo mas que el cacarear del gallo para levantarnos.
Una vez quitadas las legañas y con un hambre enorme, nos fuimos a desayunar. Al igual que en la cena, el menú estaba adaptado para alérgicos.
Leche, galletas, cereales, fruta, pan, había de todo.
Antes de terminar el desayuno, cantamos el cumpleaños feliz a nuestro amigo Lucas, que no cumplía ni mas ni menos que 7 añazos.




Con las pilas cargadas, era el momento de montar a caballo. Jinetes y amazonas fuimos por un momento.
















































Todos los que no pudimos ver la granja el día anterior, Pudimos visitarla por la mañana.

El tiempo pasaba y quedaba menos para volver a casa. Una de las últimas actividades de las que disfrutamos, fue la visita al huerto, todo tipo de verduras, frutas y hortalizas pudimos ver. Garbanzos, lentejas, tomates, zanahorias, lechugas......






Y por fin (redoble de tambores), llego el momento momentazo, esa actividad de la que habíamos oído hablar a nuestros mayores del cole, eso que les hacía tanta gracia a nuestras mamas y papás el día de la reunión.... EL ROMPECULOSSSSSSSS

































después de mil millones de subidas y bajadas al rompeculos, llegó el momento de la despedida. Aquí terminaba nuestra aventura en la granja.


Con mucha, pero mucha hambre, comenzamos nuestro regreso a casa. Estábamos deseando caer en brazos de nuestras mamas y papás para contarles el sin fin de experiencias que pasamos en un día.


















Muchas gracias a todos por confiar en nosotros para vivir esta aventura con vuestros pequeños.
                                              ¡¡¡¡¡ HASTA LA PRÓXIMA!!!!!


pinchando aquí veréis todas las fotos que hicimos.





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